miércoles, 31 de agosto de 2011

Conciencia y ejemplo.

Ayer me llegó, gracias a mi querido Maestro Yoda, un enlace a una charla de un tipo que me impactó. Se trata de Joan Antoni Melé. Podría poner miles de enlaces a charlas y artículos, pero no hace falta, pones su nombre en Google y tienes más que de sobra para hacerte una idea de qué va el tema. La charla que yo vi en primer lugar se pronunció en el contexto de un foro de Espiritualidad. He de decir que al principio lo cogí un poco con pinzas, porque bajo la etiqueta de la "espiritualidad" a veces se confunden otras cosas con las que no comulgo, o que me resultan algo superficiales. Seguí investigando y escuché charlas en escuelas de negocios, intervenciones en universidades, bueno, en ámbitos muy diversos. Con esto quiero decir que no es un gurú espiritual. Se dedica a la banca. Pero resulta que este tipo habla del Mundo. Del Mundo real, no del que compadecemos desde nuestra posición cómoda de clase media. Y de la crisis. De la nuestra y de la que lleva años y años sucediendo más allá de nuestros zapatos, nuestros bolsos y nuestras pantallas de  tele. Y de que las cosas tienen que cambiar. Y de que para cambiar las cosas, hay que empezar por uno mismo. Hay que despertar la conciencia. Echadle un vistazo y sacad vuestras propias conclusiones.

Ilustración: Embarrados

Hay cosas que no contaré aquí porque no vienen a cuento, pero quien me conoce sabe que en mi vida han habido muchos altibajos. Y resulta que cuando a todo el mundo se le complica la vida con la crisis, las cosas para mí son sencillas, y si soy sincera del todo, el mérito no es mío. Y no me quejo, Dios me libre de quejarme. Pero es un hecho que me hace pensar. Me hace pensar en lo injusta que es la vida a veces, en la cantidad de cosas que nos venden como imprescindibles y que no son más que tonterías, en las cosas a las que damos importancia. Hace tiempo que me chirría la conciencia, a mí. He tenido suerte, otros no la tienen, y ¿por qué? Hace tiempo que tengo en la cabeza muchas de las cosas que le oí decir ayer a Melé. Y creo que ha llegado el momento de dejar de tener las ideas rondando en la cabeza y pasarlas a las manos. No hablo de irme a las misiones o hacerme Hare Krishna. Hablo de empezar por casa. De cómo educar a mis hijos. No quiero que tengan la conciencia tranquila, quiero que la tengan viva y despierta. Pienso en los valores que les quiero transmitir, del ejemplo que les quiero dar, de enseñarles a que sean coherentes, conscientes, libres, de enseñarles el respeto, el sentido común y la empatía, que aprendan a dar de sí lo mejor, y a recibir de los demás también lo mejor, que valoren las cosas en su justa medida. Y no se me ocurre otra forma de hacerlo que con el ejemplo.

Por cierto, la cuenta de ahorros que tiene Falula, y la mía, están ahora en Tríodos Bank.

3 comentarios:

  1. Pues investigaremos un poco a joan antoni melé.
    Gracias guapa!!

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  2. Como decía la negra Mercedes Sosa, hipocresía morir de sed habiendo tanta agua. Hipocresía que nos vendan, en el siglo XXI, que deba seguir muriendo gente para salvaguardar nuestro bienestar.

    Triodos Bank hacía sus pinitos allá por 1984 y está demostrando que es posible hablar de espiritualidad en cualquier contexto (otra cosa son las vírgenes y la madre del cordero; otra, las religiones y sus idolatrías).

    Ya que personalizas, hago lo propio para informarte del cambio de mi firma por imperativos que no vienen al caso (en adelante, Youda). Una siempre está a esto de meter la pata.

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  3. Investigaremos! Aunque la cuenta por ahora seguirá en el banco que da de comer a la familia.

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